A las chicas no les interesa la tecnología

Un artículo por: Geek&Tech Girls

Es un hecho, a las chicas no les interesa la tecnología. Se ve claramente en el nivel tan bajo de matriculaciones femeninas en carreras técnicas y en la baja participación de mujeres en eventos de este tipo. En un estudio hecho por Microsoft, se refleja que las chicas tienen un alto interés por las asignaturas STEM (Science, Technology, Engineering, Mathematics) a los once años pero cuando tienen quince, pierden las ganas de hacer esas carreras. ¿Por qué?

Hay mucha gente que se ha hecho esta misma pregunta. La respuesta no está clara pero lo que sí se sabe es que en esa pérdida del interés intervienen los roles de género, los estereotipos, la falta de modelos referentes femeninos, y, en definitiva, el factor social y cultural.

Por ejemplo, un estudio de la Universidad de Valencia revela que conforme se avanza en los cursos de la ESO disminuye la aparición de mujeres en los libros de texto. En general, las mujeres son invisibilizadas en todas las asignaturas pero en las asignaturas STEM esta diferencia es aún mayor. Por otro lado, los productores audiovisuales tampoco ayudan, ¿cuántas mujeres hacker habéis visto en la tele? ¿y cuántos hombres? Las series y películas crean un estereotipo de “persona interesada en la tecnología” con la cual las chicas no se sienten identificadas. Y por último, desde pequeñas jugamos a cuidar bebés, a las casitas, a las muñecas…. Mientras que ellos juegan a construir, a experimentar y a tener aventuras. Lo vemos hasta en la ropa.

Lo que es más, ya no es solo que no se animen, sino que si entran en una ingeniería o en el mundo tecnológico, muchas abandonan. En este artículo se habla de varias mujeres con varios años de experiencia en la industria TIC que finalmente abandonan. Las mujeres que trabajamos en esta industria somos una clara minoría, y aunque afortunadamente no siempre es así, por lo general debemos estar constantemente demostrándole a los hombres que tenemos el mismo derecho que ellos a estar ahí, no podemos equivocarnos nunca, debemos trabajar mucho más para ser reconocidas y nuestro trabajo es menospreciado con más facilidad.

Si hubiese más mujeres en tecnología, este tipo de situaciones no se darían. Pero esa no es la única razón por la que se necesita que aumente el número de mujeres en la industria TIC. Al fin y al cabo, las mujeres constituyen la mitad de la población y por lo tanto, si en la tecnología no se ve representado ese porcentaje, será en detrimento de todo el mundo.

A pesar de que hoy en día exista esta situación, hubo un tiempo en el cual existía paridad en este sector. Es curioso el hecho de que el interés de las mujeres por las TIC empezó a decrecer justo cuando se empezaron a comercializar los primeros ordenadores personales. Estos eventos han sido a menudo relacionado ya que los PC se vendían como un juguete para niños, saliendo éstos en la mayoría de anuncios.

Las mujeres que trabajamos en esta industria somos una clara minoría, y aunque afortunadamente no siempre es así, por lo general debemos estar constantemente demostrándole a los hombres que tenemos el mismo derecho que ellos a estar ahí, no podemos equivocarnos nunca, debemos trabajar mucho más para ser reconocidas y nuestro trabajo es menospreciado con más facilidad.

Sin embargo, en países en vía de desarrollo, como Malasia, los estudios presentan un cuadro mucho más diversificado y balanceado en cuestión de representación de sexos. De hecho, en Filipinas el 30% de los trabajos IT son desempeñados por mujeres, y además, están bastante cotizadas. Algo similar ocurre en Vietnam, donde las ingenieras del software están socialmente bien vistas, cobrando más que otras mujeres que se dedican al sector de servicios o agricultura.

Pero el caso más destacable se encuentra en Malasia, en una sociedad multiétnica donde las diferencias entre clase o etnia son tan importantes como las de sexo. En la universidad de ‘Sains Malaysia’ el 65% de las estudiantes de ciencias de la computación son mujeres. También en programas de máster y doctorados en esta rama son más del 50% las alumnas, y  7 de cada 10 profesores son mujeres.

Así es, es un caso único en el mundo donde hay mayor porcentaje de mujeres que de hombres en  estudios IT. Algo similar ocurre en tecnologías de la información en la ‘University of Malaya’ donde las mujeres estudiantes representan el 65%.

Tal es la expectación que despierta el caso Malayo, que hay muchos estudios acerca de la situación tan poco frecuente. En Why is Computer Science in Malaysia Dominated by Women?  se realiza un estudio de la sociedad y cultura Malaya, y sobre cómo esta influye en esa gran representación femenina en tecnología. La respuesta es una mezcla de dos acontecimientos socio-culturales:

1. En una sociedad donde el 58% son malayos, el 27% chinos y el 7% indios y hay un estatus tan basado en razas y etnias ha surgido una clase intermedia formada por gente de diferentes etnias en la que se unen mediante el desarrollo tecnológico, resultando en una poderosa arma contra la separación por raza ,etnia o religión, ya que lo consideran la mejor fuente de empoderamiento individual y nacional.
2. Trabajos como la política, que implican estar visible y de cara al público, se consideran exclusivos para hombres en la sociedad Malaya. Es por eso, que trabajos relacionados con la programación o la tecnología, donde se está “encerrado“ y poco visible se considera un buen trabajo para una mujer. Tal es esa la idea, que incluso hay ayudas del gobierno para que las niñas estudien tecnología.

Este caso, incita, cuanto menos, a una reflexión. ¿Cómo en una sociedad tan machista y en vías de desarrollo, las mujeres lideran los trabajos tecnológicos? Porque quizás no es que a las mujeres no nos interese la tecnología, quizás eso es la excusa fácil para evitar hablar del tema, y quizás es que la sociedad en la que nacemos, vivimos y nos educan nos hace creer que debemos desempeñar ciertos roles para ser más aceptadas o más queridas, o más brillantes.