Iris López Ilustración de cabecera realizada por Teresa Pecker
Incontables veces, como a todes vosotres, me han preguntado “¿cuál es tu animal favorito?” La gente se sorprende mucho cuando respondo “no me gustan los animales”. “¡¿Cómo no te van a gustar los animales siendo vegana?!”, dicen incrédules. Yo les devuelvo la pregunta: “¿A ti te gustan los animales?”. Una efusiva respuesta afirmativa es lo que siempre me llega, a lo que respondo: “¿Y no es más raro que a ti que te gustan los animales, te los comas?”.
Es duro reflexionar sobre el consumo animal y el maltrato que conlleva, pero para eso estamos aquí, aprovechando el videojuego Sunday Gold.
Sunday Gold es una aventura point&click que combina secciones de combate por turnos y gestión de inventarios. Fue publicado en 2022 por Team17 y quiero agradecer a BKOM Studios el haber creado una obra tan única.
La trama es simple: en un futuro distópico controlamos un grupo de ladrones que descubren casi sin querer un entramado político-empresarial que revolverá a la sociedad si sale a la luz.
Nuestres protagonistas: Frank, encargado de analizar el terreno, forzar cerraduras y navajear a cualquiera que se ponga por delante, Sally, encargada de mover objetos pesados, de sanar a les herides y de golpear con sus puños; y Gavin, encargado de los sistemas informáticos, de fabricar cachivaches y de batear cualquier amenaza.
Cabe decir que este trío protagonista son considerades parias sociales. Se reúnen en un bar de mala muerte, no llegan a fin de mes para pagar el alquiler y se les ha despedido por su ideología y estilo de vida. Vale, Iris, genial, ¿pero qué tiene que ver todo esto con el maltrato animal? Pues todo tiene que ver con ello.
En el futuro distópico que ha creado BKOM Studios, les perres al morir son operades y resucitades cibernéticamente para competir entre elles en batallas a muerte. No es algo que se haga en la clandestinidad, sino que es el mayor y más popular deporte y recibe el nombre de King’s League. Sunday Gold es el perro imbatible que gana todas y cada una de las peleas a las que le presenta Kenny Hogan, principal antagonista de la obra.
Durante nuestros “robos” e “investigaciones” descubriremos que Hogan no es trigo limpio -por si no había quedado claro- y nos enfrentaremos a él y sus secuaces con nuestras habilidades mientras nos topamos con asuntos del pasado.
Sea como sea, Sunday Gold nos muestra un futuro donde, no solo se usan animales para el consumo y diversión, sino que una vez fallecides, siguen usándoles a su antojo. La pregunta aquí es: ¿Sunday Gold es un juego distópico porque se usan animales para competir en un cruento “deporte” o es distópico porque la tecnología tiene el poder de “revivir” seres muertos?
A muchas personas no les afectará el hecho de que se usen animales porque, de hecho en nuestro mundo -y más en nuestro país-, lo hacemos. Que perres revivides sean armas y que se peleen entre elles es solo un paso más de las peleas de gallos, del toreo, de las propias batallas de canes…
Y todo esto es solo la superficie, la punta del iceberg. Las macrogranjas, la reclusión animal, la venta de pieles, la caza, la pesca… Todo eso sustenta la violencia latente hacia los animales. Todo eso sustenta que nos planteemos la existencia de un futuro en el que se puede revivir a les perres para hacerles combatir.
Pero por suerte, en Sunday Gold, encontré este panfleto propagandístico. En él podemos leer que existe el movimiento Furias Unidas. Dicho movimiento existe para proteger a les animales del maltrato ejercido por la humanidad. “Los perros fallecidos merecen descansar en paz, no que los reanimen y los usen en eventos deportivos salvajes”, leemos textualmente.
Las Furias Unidas sostienen que, si no hay más remedio, no dudarán en usar la violencia. Si esa es la única forma de salvar a les animales, lo harán. Mucha gente puede pensar que este movimiento es radical y que Las Furias Unidas no deberían existir. Que usar la violencia es pasar el límite que no se debe pasar.
Pero yo me pregunto: ¿no es usar la violencia el revivir animales y hacerles combatir a muerte entre elles? ¿No es usar la violencia que la gente entrene gallos para que peleen? ¿No es violento ver cómo un torero armado y entrenado acaba con la vida de un toro? ¿No es violento ver cómo las vacas están siendo sobrealimentadas, violadas y encerradas tan solo para producir leche? ¿No es violento que cuestionen constantemente por qué no comes animales?
Yo lo tengo muy claro. El límite está en que los animales sean y vivan libres. Y como Las Furias Unidas, podemos luchar hacia ese objetivo. Reduciendo el consumo, educándonos, no alentando “deportes” donde se maltratan animales.
Me niego a vivir en un futuro donde no nos importa que el revivir a un animal solo sea para seguir explotándole. Y si no nos dejan otra opción, seremos violentes hasta pararlo todo.
